Evangelio viernes 16 de junio
Viernes 16 de junio de 2023 | Alejandra Castelblanco16 de Junio de 2023
Evangelio según San Mateo, capítulo 11, 25 - 30
Solemnidad del Sagrada Corazón de Jesús
Jesús dijo: "Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, por haber ocultado estas cosas a los sabios y a los prudentes y haberlas revelado a los pequeños. Sí, Padre, porque así lo has querido. Todo me ha sido dado por mi Padre, y nadie conoce al Hijo sino el Padre, así como nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar." Vengan a mí todos los que están afligidos y agobiados, y yo los aliviaré. Carguen sobre ustedes mi yugo y aprendan de mí, porque soy paciente y humilde de corazón, y así encontrarán alivio.
Porque mi yugo es suave y mi carga liviana."
Meditación de Alejandra Castelblanco de Prieto
"los que están afligidos y agobiados"
Jesús parece decirnos: hay situaciones dolorosas, momentos de angustia y de mucha demanda que traen aflicción y agobio. Yo quiero ser su respiro su, su perspectiva positiva. Eso que vives podrás superarlo, pero yo quiero que sea conmigo, que sientas mi compañía para que salgas fortalecido, para que puedas experimentar alivio, descanso y esperanza. Yo veo todo lo que sucede en e l mundo, me entristece que no cuenten con mi ayuda, porque quiero de todo corazón que se sientan aliviados y queridos y encuentren paz en su alma. Vengan, Yo los aliviaré.
Trabajar con niños es maravilloso, pero al mismo tiempo, muy demandante. No poder hacer más por cada alumno, tener que cumplir con tanto anexo, me trae aflicción y agobio. A mi alrededor, también lo veo y no solo en mis compañeros de trabajo, sino también dentro de mi familia, de mis amigos. Todos parecemos vivir una vida sin parar, sin respiro, con mucho por cumplir y poco por descansar o reflexionar. Jesús me invita a ir a Él, a aprovechar las oportunidades de silencio, de conexión con lo sobrenatural, de descanso del alma. Quiero en verdad, aceptar esa invitación para disfrutar del alivio del alma que Él quiere regalarme.
Querido Señor: hoy me invitas a ir a Ti. Quieres aliviarme y yo no descubro o ignoro tus invitaciones. Hazme estar alerta, a estar con el oído puesto en tu corazón y a reconocer cada momento de cielo que quieras regalarme. Necesito estar más aliviada, más alegre y esperanzada para poder transmitir mejor tu mensaje a los demás. Gracias por estar siempre, por querer compartir mis preocupaciones y dolores. Transforma mi corazón y ayúdame a escucharte cada día y sentir esa paz que tanto necesitamos todos.
AMÉN