Evangelio viernes 12 de enero
Viernes 12 de enero de 2024 | Alejandra Castelblanco12 de enero de 2024
Evangelio según San Marcos capítulo 2, 1-12
Viernes de la primera semana del Tiempo Ordinario
Cuando a los pocos días volvió Jesús a Cafarnaún, se supo que estaba en casa. Acudieron tantos que no quedaba sitio ni a la puerta. Él les proponía la palabra. Llegaron cuatro llevando un paralítico y, como no podían meterlo por el gentío, levantaron unas tejas encima de donde estaba Jesús, abrieron un boquete y descolgaron la camilla con el paralítico. Viendo Jesús la fe que tenían, le dijo al paralítico: «Hijo, tus pecados quedan perdonados.» Unos escribas, que estaban allí sentados, pensaban para sus adentros: «Por qué habla este así? Blasfema. ¿Quién puede perdonar pecados, fuera de Dios?» Jesús se dio cuenta de lo que pensaban y les dijo: «¿Por qué pensáis eso? ¿Qué es más fácil: decirle al paralítico "tus pecados quedan perdonados" o decirle "levántate, coge la camilla y echa a andar"? Pues, para que veáis que el Hijo del hombre tiene potestad en la tierra para perdonar pecados...» Entonces le dijo al paralítico: «Contigo hablo: Levántate, coge tu camilla y vete a tu casa.» Se levantó inmediatamente, cogió la camilla y salió a la vista de todos. Se quedaron atónitos y daban gloria a Dios, diciendo: «Nunca hemos visto una cosa igual.»
Meditación de Alejandra Castelblanco Moreira
"Al ver la fe de esos hombres"
Jesús parece decirnos: yo me sorprendí por la fe de esos hombres. Ellos estaban seguros que yo sanaría al paralítico. Les he dicho que la fe mueve montañas. Que, si tuvieran fe como un granito de mostaza, podrían pedir cualquier cosa. Estos hombres sabían que la fe salvaría a su amigo. Ahora yo les pregunto, ¿cuánta fe ponen en lo que piden? Cuánta confianza existe en mi Padre que todo lo puede. Anímense, pidan con fe que se les concederá.
Hace tiempo me pasa que trato de no pedir. Siento que si lo hago y no pasa es peor a no pedir nada y esperar no más. Sin embargo, creo que no sé pedir. Los hombres de este pasaje sabían lo que querían y pidieron lo que necesitaba el paralítico. Creo que debo ahondar más en eso que necesito para seguir caminando. En eso que me impide avanzar para aumentar mi fe y seguir este caminar seguro de la mano de Jesús y de María. Quiero aumentar mi fe y mi confianza para pedir segura de lo que necesito.
Querido Señor: ayúdame a descubrir lo que necesito para dejar mi camilla y caminar con paso seguro. Quiero descubrir cada cosa que necesito para crecer, para aumentar mi fe, para pedir con confianza, para no desesperar y aceptar que tus tiempos no son los mismos que los míos. Gracias por este nuevo año que comienza para que traiga descanso en las manos seguras del Padre Dios y de María.
AMÉN