Evangelio martes 16 de mayo

16 de MAYO del 2023

Evangelio según San Juan, capítulo 16, 5 - 11

Martes de la Sexta Semana de Pascua

En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Ahora me voy al que me envió, y ninguno de ustedes me pregunta: '¿A dónde vas?'. Pero al decirles esto, ustedes se han entristecido.
Sin embargo, les digo la verdad: les conviene que yo me vaya, porque si no me voy, el Paráclito no vendrá a ustedes. Pero si me voy, se lo enviaré. Y cuando él venga, probará al mundo dónde está el pecado, dónde está la justicia y cuál es el juicio. El pecado está en no haber creído en mí. La justicia, en que yo me voy al Padre y ustedes ya no me verán.
Y el juicio, en que el Príncipe de este mundo ya ha sido condenado."

Meditación de Juan Enrique Coeymans Avaria

Porque si no me voy, el Paráclito no vendrá a ustedes.

Pareciera que el Señor Jesús nos dice: Mi venida y encarnación, no es sólo para que Uds. conozcan por Mi al Padre. sino también para revelar la Trinidad. Yo me encarné para que Uds. creyeran que mi encarnación es para que lo divino pueda estar unido a lo humano, y por eso abrirse al misterio del Espíritu Santo, que nos acompañará, hasta el final de los tiempos. Les he dicho a Uds. que lo único que el Padre no puede negar cuando lo pidan es el Espíritu Santo, pero Uds. olvidan fácilmente este regalo que les hacemos. Por eso, no se olviden e invóquenlo todo el tiempo.

Para mi fue un regalo de abrir los ojos a la inmensidad de la benevolencia de Dios Uno y Trino esa revelación que nos hizo Jesús y que no se habla ni se toma conciencia en la Iglesia Pero ese amor de Dios pide ser correspondido, si nos aman tanto es para que nosotros también lo amemos y no para que abusemos de esa misericordias maravillosa de la Trinidad en nuestras vidas. Como cristianos debemos vincularos al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo.

Señor Jesús, te adoro desde mi pequeñez y miseria, pero abierto a tu amor. Señor envía el Espíritu Santo a mi alma en las situaciones en que la presencia del Espíritu Santo es necesaria, y eso es siempre. Te pido la gracia de tener una relación de cariño y gratitud permanente al Espíritu Santo y a no dejar de invocarlo, para superar mis debilidades y pequeñeces y poder ser leal a Dios Uno y Trino en cada instante de mi vida diaria

AMÉN