Evangelio lunes 9 de octubre
Lunes 9 de octubre de 2023 | Bernardita Marín Paul9 de octubre del 2023
Evangelio según San Lucas capítulo 10, 25 - 37
Lunes de la vigésimo séptima semana del Tiempo Ordinario
Un doctor de la Ley se levantó y le preguntó para ponerlo a prueba: "Maestro, ¿qué tengo que hacer para heredar la Vida eterna?". Jesús le preguntó a su vez: "¿Qué está escrito en la Ley? ¿Qué lees en ella?". Él le respondió: "Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y con todo tu espíritu, y a tu prójimo como a ti mismo". "Has respondido exactamente, le dijo Jesús; obra así y alcanzarás la vida". Pero el doctor de la Ley, para justificar su intervención, le hizo esta pregunta: "¿Y quién es mi prójimo?". Jesús volvió a tomar la palabra y le respondió: "Un hombre bajaba de Jerusalén a Jericó y cayó en manos de unos ladrones, que lo despojaron de todo, lo hirieron y se fueron, dejándolo medio muerto. Casualmente bajaba por el mismo camino un sacerdote: lo vio y siguió de largo. También pasó por allí un levita: lo vio y siguió su camino. Pero un samaritano que viajaba por allí, al pasar junto a él, lo vio y se conmovió. Entonces se acercó y vendó sus heridas, cubriéndolas con aceite y vino; después lo puso sobre su propia montura, lo condujo a un albergue y se encargó de cuidarlo. Al día siguiente, sacó dos denarios y se los dio al dueño del albergue, diciéndole: 'Cuídalo, y lo que gastes de más, te lo pagaré al volver'. ¿Cuál de los tres te parece que se portó como prójimo del hombre asaltado por los ladrones?". "El que tuvo compasión de él", le respondió el doctor. Y Jesús le dijo: "Ve, y procede tú de la misma manera
Meditación de Bernardita Marín Paùl
"Lo vio y se conmovió"
Creo que el Señor me quiere decir; te pido, ama a todos sin distinción y también al que más te cuesta. Es fácil ser fiel y amar a tus amigos, familia o a los que admiras y te entregan algo, pero quiero que ames y veas al que nadie ve, al que no te aporta, al que todos evitan. Sé humilde y toma tu lugar y verás a muchos que te necesitan. Nada justifica el desamor para con tu prójimo, No has comprendido que el dolor que le causas a él, es como si me lo hicieras a Mí.
Creo que hoy día arrasar con todo, con tal de ser el primero, es común y hasta bien visto. Vivimos muchas veces de forma muy egoísta pretendiendo ganar en todas, sin considerar que hay otros que también necesitan ser vistos, invitados, considerados y amados. Al no visualizar su dolor, los denigro y los humillo, falto a la misericordia. Quiero no justificarme, ni disfrazar acciones como buenas o suficientes, cuando no lo son.
Señor, ¡estoy abrumada! Necesito del reposo del alma, y disfrutar de tu paciencia y amor. Siempre preocupada de los muchos frentes que hay que llevar. Ayúdame, Señor, a ser buena. No permitas que yo sea la causante del dolor de nadie. Abre mis ojos para ver la necesidad y dolores ajenos y ayúdame a sanar mis propios dolores, que muchas veces enceguecen mi comportamiento y también ocupan mucho de mi tiempo. Quiero saber perdonar y perdonarme para amar, desde lo íntimo y profundo. Que así sea.
AMÉN