Evangelio domingo 21 de agosto

21 DE AGOSTO DEL 2022

Evangelio según San Lucas capítulo 32, 22 - 30

Vigésimo Primer Domingo del Tiempo Ordinario

Jesús iba enseñando por las ciudades y pueblos, mientras se dirigía a Jerusalén. Una persona le preguntó: "Señor, ¿es verdad que son pocos los que se salvan?". El respondió: "Traten de entrar por la puerta estrecha, porque les aseguro que muchos querrán entrar y no lo conseguirán. En cuanto el dueño de casa se levante y cierre la puerta, ustedes, desde afuera, se pondrán a golpear la puerta, diciendo: 'Señor, ábrenos'. Y él les responderá: 'No sé de dónde son ustedes'. Entonces comenzarán a decir: 'Hemos comido y bebido contigo, y tú enseñaste en nuestras plazas'. Pero él les dirá: 'No sé de dónde son ustedes; ¡apártense de mí todos los que hacen el mal!'. Allí habrá llantos y rechinar de dientes, cuando vean a Abraham, a Isaac, a Jacob y a todos los profetas en el Reino de Dios, y ustedes sean arrojados afuera.
Y vendrán muchos de Oriente y de Occidente, del Norte y del Sur, a ocupar su lugar en el banquete del Reino de Dios. Hay algunos que son los últimos y serán los primeros, y hay otros que son los primeros y serán los últimos".

Meditación de Juan Enrique Coeymans Avaria

Hay algunos que son los últimos y serán los primeros, y hay otros que son los primeros y serán los últimos".

Pareciera que Jesús nos dice: Uds. miran con un cierto temor las palabras que digo en esta escena de los Evangelios, pero ellas se refieren a algo más sencillo: si recuerdan, "los que son como niños entrarán en el reino de los cielos". En Israel los niños no eran considerados como grandes ni como personas dignas de respeto, ellos eran los últimos, y mis palabras, como muchas de mi enseñanza, hay que entenderlas en la línea del amor, los últimos que son los que se comportan y viven como niños eán los primeros,

Es muy cierto que uno cuando escucha algo que asusta, inmediatamente nos ponemos en posición de acercamos por el lado malo o contradictorio, cuando la verdad es que todo se resuelve, si se mira en el contexto de toda la revelación, y no de nuestros prejuicios. Lo de los primeros que serán últimos no es solo una reflexión protocolar, de done sentarse en una mesa, sino que es todo un llamado a ser sencillo, humilde, alegre y confiado como un hijo del Padre.

Señor Jesús, lo primero que te digo es agradecerte por tu misericordia y comprensión. Te pido la gracia de crecer en infancia espiritual, porque eso es lo definitivo para llegar a tu compañía. Me acecha algunas veces la tentación de complicarlo todo, cuando al final al Reino llegaremos porque Tú quieres que estemos cerca tuyo. Señor, dame fuerzas para crecer en simplicidad, y un corazón inmenso para amar a todas las personas con las que encuentre en mi vida.

AMÉN